Pero la realidad, como el dinosaurio del cuento de Monterroso,
está todavía allí: intacta, bueno, no precisamente intacta, rasguñada; esperando la develación.

Rosario Castellanos

viernes, diciembre 26, 2003

FELICES FIESTAS!!!!! Feliz diciembre, Feliz navidad, Feliz día de los inocentes y me reservaré el año nuevo para el dia primero... A aquellos que no creen en estas cosas, igual les conviene que sean vacaciones y a los muchos que tienen que trabajar, pues ni modo, a trabajar. La Tijuana está muy fría y lluviosa, aunada a la influenza que enviaron los gringos a tierras mexicanas. Así que lo mejor es cuidarse, de la gripa y los excesos. Aunque este consejo en diciembre es vano: hay comida rica por doquier, pavo recalentado, tamales, ponche (con piquete y sin piquete), pozole, hasta comidas prohibidas como la cahuama (supe de un caso). En fin, este tiempo más que de reflexión y alegría por el nacimiento de dios, es un momento de comilongas, compartir chismes, pláticas y beber y beber y beber... Sabemos que esto es cierto, lo más curioso que me tocó escuchar esta ocasión en la noche del 24, es una historia de un amigo de la familia que contó que un tío de él viviendo en el DF hace muchos años, atropelló a una persona, esto ocasionó que saliera huyendo hacia Los Ángeles, donde hizo su vida junto a su esposa, a quien le rogó y rogó que se fuera con él hasta que lo logró. Tuvieron hijos allá y al pasar el tiempo y ellos estaban ya grandes, una vez el tío fue al centro de esa ciudad, se encontraba solo, le dio un infarto y murió. Ahí sin más ni más, lo hallaron los homless, ya muerto. El amigo de la familia concluyó la historia diciendo que ese fue el precio que pagó por lo que el tío había hecho en el DF. Yo nada más pelé los ojos, asombrada de escuchar un cuento así y me pareció que a la luz del vino, la cerveza, el alcohol en general, la gente se atreve a contar historias de ese tipo en navidad.

No hay comentarios.: