Pero la realidad, como el dinosaurio del cuento de Monterroso,
está todavía allí: intacta, bueno, no precisamente intacta, rasguñada; esperando la develación.

Rosario Castellanos

miércoles, junio 30, 2004

hoy me niego a escribir, pensar, redactar, hacer cuadros, cálculos, además de hacer de cenar, comer y desayunar, así como de limpiar, lavar y mostrar buena cara. Hoy me niego por dos horas tal menester. Mi cabeza casi revienta (como revienta la de casi todos los tesistas desvelados que veo pulular por la escuela). Hoy apenas conocí el edificio de la biblioteca nueva. Está más amplia, aunque creo que se quedaron cortos, porque noté que apenas cabían las revistas en su respectivo espacio. También fui a poner mi carota de no he terminado el borrador, aunque mi directora se ha mostrado paciente conmigo, ella estuvo preocupada pensando que quizá yo ya no quería hacer nada, como a veces les sucede a los tesistas, que dejan todo a medio camino. No, dije que iba a terminar lo que empecé hace dos años y terminaré. Si no me corrieron cuando parí un hijo, ahora no pararé yo hasta terminar esta tesis.

¿que a qué se debió una baja y una alza en el crecimiento de la población en Baja California durante las décadas de 1930 a 1940 y de 1940 a 1950? Dichas baja y alta diferentes al resto de lo que sucedió en el país. Un estado de alta recepción como Baja California que experimentó la influencia de las políticas del centro y las de Estados Unidos, pero sobre todo, la incertidumbre del miedo a perderla y de anexión a Estados Unidos como había sucedido con más de la mitad de su territorio.

Pues bien, a veces le da miedo a uno no saber por qué caminos sinuosos se encuentra al estar en el proceso de elaboración de una tesis. Una cosa es segura, si bien no esté terminada, estará acabada antes de que sea el último día de julio. Una especie de trabajo final más largo de lo común, con grafiquitas y todo. El problema de trabajar con los censos viejos, es que tienes que capturar toda la información que se requiere. Y uno no tiene el derecho de equivocarse en los numeritos, si esto pasa puede traer diferencias sustanciales en la interpretación o en los resultados.

Quería acabar el borrador antes de mi cumpleaños, pero no se si será posible, en fin trataré.

Como ando en mi dosh patash, hoy iba caminando para recoger a mi hija con una tía, el caso es que pasé al lado de una obra en construcción. Los albañiles, que eran bastantes y montoneros, claro, empezaron a chiflar y a tirar besos. Yo muy quitada de la pena, voltié y les dije que si era a mí a la que tiraban besos, entonces se sorprendieron y uno que se escondía tras lazar los tronadores besos con mayor razón se tapó la cara y se fue detrás de una pared. Yo me reí y dije: uuu y se esconde, pa'que pues... y le empezaron a hacer carrilla.
Algo que yo no entiendo de verdad es eso de los besos, ¿para qué tiran besos? ¿no es suficiente con los chiflidos? En fin, creo que es todo por hoy...

martes, junio 29, 2004

"En definitiva, esperar, es lo que más cuesta. Sobre todo cuando te dicen que te escribirán, y no sucede." Esto fue lo que le asestó la Márilyn al Gregorio la vez que hablaron. Aunque el Gregorio no entiende el afán de la Márilyn, él le asegura que lo hará, pero no le menciona cuándo. A él no le interesan tanto esas cosas le ha dicho, porque en primera, cuestan dinero y en segunda, le dan mucha flojera: -Ésa, le recriminó, es la diferencia entre hombres y mujeres. Ella no quiso hacer barullo, ya no le contestó ni soltó palabra, que no tiene caso, pensó. -Está bien, le dijo, sólo no me digas que me escribirás, y ya. En otras ocasiones y con otras personas es hasta poético, ahí si no le da flojera, pensó la Márilyn, mientras miraba hacia el horizonte del cerro que le permitía entrever el caserío y desde un único teléfono público que sí servía de la colonia. Colgó enojada y se fue corriendo a su departamentito ya que había dejado a sus hijos solos y encerrados, pero no sin la leche y el jabón en la mano que compró en la tiendita.

viernes, junio 25, 2004

para descansar la mente... digo... también tiene derecho una...

creo que así me siento:

martes, junio 15, 2004

La porra que le cantó Ixtchel a Rogelio por teléfono (para los que hayan leído su post acerca de los Pumas campeones), fue:


¡¡¡¡¡¿Cómo no te voy a querer?,
¿cómo no te voy a querer?
si mi corazón azul es
y mi piel dorada,
siempre te querréééé!!!!!



En fin, acá, los morros y morras andan con el furor encima, sus playeras "apumadas", hablando en los "peseros" sobre el triunfo futbolístico, en fin, todavía no se les baja... Será que a fuerzas he tenido que pasar por metro CU estos días..., justo me tocaron estos días... y realmente se disfrutan... así que después de trece años, un día trece, PUMAS es campeón.

viernes, junio 11, 2004

Por otro lado, las fotografías de los maltratos recibidos a soldados iraquíes por parte de soldados estadounidenses rotaron el mundo por internet y por las noticias televisivas. Sin embargo, las vejaciones y violaciones realizadas a mujeres fueron invisibilizadas. Muchas de estas mujeres, optaron por el suicidio. Les invito a ver algunas de estas imágenes de lo más crudas y horripilantes. Porque creo que sólo con la denuncia y con el sostenimiento de la palabra, de la voz de todos, es posible que existan algunos míseros cambios.

La página se encuentra en la sección de Opinión de la Triple Jornada de junio del 2004 (buscar el ícono de Opinión del lado izquierdo de los reportajes).

"sin condón no hay don"

Ahora sí transcribiré un artículo aparecido en la Triple Jornada de junio del 2004, debido a que me parece que es muy alusivo a la "triple jornada" en la que estamos inmersas una gran mayoría de mujeres y que me pareció ameno y representativo de lo que se vive acerca de la salud sexual de las personas: mujeres y hombres.

Sexo por sacrificio sólo en el circo romano
Hablando de mujeres y condones…

“Sin protección, no hay relación”,
No aceptar ninguna relación sexual si no se está dispuesta

Isabel Bueno

Las mujeres en estos momentos de modernidad, estamos tratando de hacer más de lo que nos toca para mejorar nuestra calidad de vida personal y familiar. Esto ha sido así desde las cavernas, y aunque el mundo ha cambiado, sigue en nuestras manos el cuidado y bienestar de otros.
Debemos saber de nutrición, buscar la alimentación baja en carbohidratos, rica en fibra alimenticia, que mantenga a raya el colesterol, y además sabrosa.
Recordar nuestro papanicolau, explorarnos el pecho y recordar a los hombres que se cuiden la próstata. Tratar de que nuestro galán vaya sintiendo la necesidad y el gusto de tomar el cargo que le corresponde en el bienestar de la familia y la casa. Ya no es sólo un proveedor, debe ser un “compañero–cuidador”.
Educar a nuestras niñas en la asertividad con feminidad, no desatar una tormenta porque estamos haciendo “feministas rabiosas” o que no saben hacer “nada” y fodongas. Encaminarlas a modo que su galán no las ningunée si no son doctoras en física nuclear que además saben hacer un pipián de maravilla. Animarlas a que se relacionen con un hombre capaz de aceptar que ella no lo necesita para sobrevivir, pero que se puede llegar a ser una pareja amorosa con proyectos personales de vida, y caminar juntos sin atorarse (mucho) en conflictos de dinero y poder.
A los varoncitos tenemos que mejorarles la autoestima basada en ser amorosos y sensibles, menos machitos que su papá y aventarnos el boleto de que laven sus tenis, se sepan hacer un desayuno, que recojan su plato, lo laven, arreglen su cuarto y hagan su cama (Fácil ¿no?).
Queremos todo eso para que nuestros hijos sean solidarios con su pareja futura, más que el galán que reeducamos mientras trabajamos dentro y fuera de la casa, tratando que nuestros seres queridos no dependan (tanto) de nosotras.
Pero también queremos salir a bailar, divertirnos, platicar con otras y otros de lo que pasa en el mundo; del desacuerdo con las políticas para mujeres de Andrés Manuel, que si Bush es un ignorante, que no nos gusta su amistad con nuestro bigotón de botas, que si al robaproa ni un centavo más y otros temas. Esta es la triple jornada de la mujer actual. Agobiante. La modernidad nos trajo algunas libertades, pero también nuevas preocupaciones. Una de ellas, justo cuando estábamos empezando a hablar de sexualidad con nuestras hijas sobre “más orgasmos y menos embarazos”, viene el VIH-SIDA. Ahora el tema es el uso correcto del condón.
Recordemos la lección: Si no hay condón no hay “don”.
“Es tiro por viaje”, a cada relación, un condón. Se usa, se quita sujetando desde la base del pene, y se tira.
Resulta que los chavos no se quieren poner el condón y tratan de evitarlo con frases como: “a poco me ves cara de sidoso” o “no se siente nada” o "es como chupar paleta con envoltura” y originalidades de esas. Hay que recordarles que la actividad sexual no es sólo un pene en una vagina, sino dos personas que pueden intercambiar innumerables caricias y utilizar todos los sentidos para el placer.
Y de nuevo, es la mujer quien debe tener inventiva y paciencia para hacer que el galán se ponga el condón en cada relación, para que no se necesite la pastilla del día siguiente, o un buen servicio de interrupción de embarazo o llegar al ¿“qué nombre le ponemos”? porque hay bautizo en puerta.
Por eso, ahí van algunas sugerencias sobre cómo llegar a negociar el uso del condón.

1.- Afirmar desde el inicio de la relación que no se accederá a ninguna relación sexual si no se está dispuesta. Aunque nos digan “hace daño quedarse con las ganas”, no es cierto, no pasa nada. Las mujeres de más de 40 años vivimos en la época en que nos quedábamos “con las ganas” muchas veces, y sufrimos los cólicos a los que nuestro puritanismo nos condenaba.
Ahora sé que la masturbación durante la menstruación hubiera sido un alivio a la congestión pélvica por excitación no resuelta. Es el mismo caso de un dolor de testículos. Se les puede recordar: “una mano amiga tradición que obliga” como una receta que ha probado su eficacia con los años.
¿Por qué no se debe ceder a las demandas apasionadas del galán?
Porque las estadísticas nos hablan de que miles de millones de mujeres han llegado a su primera relación sexual aceptando (o sin aceptar y a la fuerza) la urgencia de sus compañeros, y eso ha sido la pomada contra el erotismo que las ha perseguido por muchos años.
Tener sexo por sacrificio, sólo en el circo romano.

2.- Cuando la pareja lleva tiempo de estar juntos, de tres meses a un año, viene la pregunta clave: ¿Es que no me tienes confianza? vamos a “hacerlo” ¡sin condón¡
Puede ser que sí exista la confianza, es decir, se ha hecho un acuerdo de hacer la relación exclusiva, sin terceros en los espacios eróticos. De ser así, la prevención del embarazo puede ser la razón para el uso del condón, pero hay que llegar a un acuerdo sobre quién se va a cuidar, si ella, él, o los dos para que no falle, y deben tenerse siempre a la mano ambos tipos de condones.

3.- También hay el hombre que desafiante pregunta ¿por qué tantos peros? (los chavos lo dicen con d) ¿para qué condón? Retan: “si es tan liberal, por qué sale con esas jaladas”; insisten: “si yo tuviera SIDA, no andaría buscando chavas”. Con eso a veces logran minar la capacidad de autocuidado de las muchachas, especialmente las más jóvenes. Y ¡cuidado! si el chavo insiste en no usar el condón, mejor no discutir, hay que dejarlo con la palabra en la boca, de lo contrario puede creer que necesitamos que él tome la decisión, a fuerza. Es famosa la frase: “decía que no, pero se veía que sí”.
Hay que decir siempre que no hay placer en hacer el amor cuando hay temor al contagio de una enfermedad o a un embarazo. Que la prevención es la única solución, y que por ahora la única prevención es el condón, masculino y/o femenino.
Sugerencias: Aprender a pedir sin vergüenza ambos condones, en especial el femenino, así ante la mayor demanda se logrará mejor precio. Si no sabemos cómo se pone, comprar uno y ensayar en un plátano macho, (no porque ellos estén tan bien servidos sino que es lo más parecido en la forma), para aprender a que no se rompa y se deslice sin problemas el condón, ya que se necesita habilidad y experiencia. Y hay que leer el instructivo.

4.- Siempre se debe negociar el uso del condón hablando firmemente: “sin protección, no hay relación”, y de ahí, no escuchar nada que nos haga cambiar de esta postura; no dar excusas ni razones, si él sigue insistiendo cortar el trato definitivamente. Por eso hay que hablarlo antes de llegar al hotel o a la recámara o al asiento trasero del auto, para que no haya sustos y el cuate llegue a creer que él tiene derechos y tú, obligaciones.

5.-En las parejas de muchos años, si el galán es de los salidores, de muchas chavas y poco cuidado, hay que hablar sin enojo ni pleito, “si no te cuidas tú, y andas con otras mujeres sin usar el condón, a mí me puedes transmitir alguna enfermedad. Si tú no piensas en mí y mis hijos, yo sí debo cuidarme, por mí y por ellos. De ahora en adelante sólo voy a tener relaciones contigo si hay condón de por medio” y pedirlo en el Seguro o el ISSSTE o comprarlo en la farmacia.
Mantener esa decisión es difícil. El puede gritar, amenazar, tratar de golpear o hacerlo, pero si nuestro galán no nos cuida nos vamos a sentir furiosas con nosotras mismas y desesperadas si es que llegamos a enfermarnos de Herpes, VIH+ o cualquiera otra enfermedad. Hay que recordar que el SIDA no se nota hasta que ya es tarde.

En los últimos años ha habido un gran número de mujeres contagiadas por sus compañeros que viven relaciones sexuales sin precaución con otras mujeres y/o con otros hombres. A veces nos sentimos con una gran carga al sabernos pareja de un hombre que tiene relaciones con otros hombres, ya sea casuales o permanentes. El problema no es fácil de sobrellevar, las mujeres pensamos en un rival del mismo sexo, no en otro hombre, y a eso no sabemos responder. Puede ser necesaria una terapia que nos ayude a reforzar nuestra autoestima como mujeres.
Es difícil que el compañero temporal o permanente acepte que es promiscuo y bisexual, por eso ante la duda: PREVENCIÓN.
A veces sospechamos del galán, así que es importante detectar cómo lo visualizan los compañeros, qué se oye sobre él, que cuenta o no, de las reuniones de trabajo.
Si es de los que tienen salidas de trabajo permanentes, llevan años de hacerlas y siempre salen con que trabajaron hasta tarde, cerciórese de eso con una llamada a la oficina o al trabajo. Hay que tener eso en cuenta para cuando se hable del tema.
También, si ya hemos tenido alguna enfermedad y la ginecóloga dice que es de transmisión sexual, ya se tiene una buena razón para hablar con fuerza y no dejarse asustar.
Todo esto debe hacerse si es que hay una buena razón para dudar, si el galán es de los que tratan a las mujeres como menores de edad o faltas de inteligencia, que no nos cuidan en lo cotidiano, pero exigen fidelidad y exclusividad, que sospechan de todos siempre. De esos hay que desconfiar.
Se puede sacar el tema e iniciar el diálogo después de leer este artículo.
Por si la discusión se pone difícil, es conveniente llevar un papelito donde se apunten los datos que queremos mencionar, qué cosas debemos dejar dichas sin falta.
Recuerde, nadie tiene derecho a lastimarnos o ponernos en riesgo, aunque sea el esposo con el que está casada por las tres leyes. Si él le transmite alguna enfermedad por descuido y/o promiscuidad, eso es causa de divorcio. Pero no se espere a que él le “pegue” una enfermedad, evite llegar a la legalidad del divorcio, mejor prevenga y cuídese.
Si él no la cuida, usted compre su condón femenino y no acepte nada sin usarlo. Mejor prevenir que dejar hijos huérfanos o adelantar nuestro paso por la vida.


viernes, junio 04, 2004

Mujeres soldadas en Afganistán... ¿ustedes qué piensan?

Esto lo transcribí de La Jornada:

MUJERES EN LOS EJÉRCITOS
Quienes participan de la política de ganar espacios en todas partes podrán estar contentas de que el siglo XXI haya incorporado a las mujeres formalmente en sus guerras diversas. En Afganistán se inauguraron las primeras mujeres de aviones bombarderos, en Irak las primeras prisioneras de guerra, y en Palestina las primeras mujeres-bomba suicidas. No todas las mujeres compartimos ese contento.

jueves, junio 03, 2004

Lo confieso, a mí de niña me gustaban las barbies, a todas las niñas que conozco les gustan, no he encontrado a alguna que diga: no, no me regalen, no me gustan las barbies... Sin embargo, pocos sabemos la verdadera historia que encierran esas muñecas, de dónde vienen, qué objetivo tuvieron, cómo empezaron a gustar el tipo de muñecas con cuerpo de mujer y además, anglosajona. Un breviario de su historia fue publicado en la Triple Jornada de mayo del 2004 por Amalia Rivera y se titula: Barbie: de prostituta de caricatura a “mujer modelo” moderna y consumista.

Hace ya rato leí ese artículo, pero lo perdí y hasta hoy lo volví a encontrar. Se los comparto...

miércoles, junio 02, 2004

Pensé que era la única que había observado y reprobado el hecho de las mamás siempre estaban afuera de la escuela después de dejar a los hijos, durante el recreo y al salir de clases. Pensé que estaba loca cuando me decía a mí misma: pinches viejas, a qué se quedan, nada más a chismear, a qué mas, quizá son amas de casa que no tienen mayor entretenimiento que estar aquí, etcétera, etcétera, bueno, me decía, pobres, no tienen más que hacer, aunque de qué chismearán, quien sabe, de la novela, del big brother o de qué, mejor ni averiguar.

A diferencia de Conflictiva, quien ahora escribió sobre la próxima graduación de su hijo de sexto año, yo sí escribí algunos post sobre el día de las madrejitas. Totalmente reprobé el tipo de evento, aunque me contestaron que las mamás debían divertirse, que cada quien, etcétera. Apruebo a Conflictiva en el hecho de no aceptar que su hijo vaya al evento de su graduación y con el dinero de la toga compre libros para la biblioteca. Lo digo porque el año pasado me enojé mucho y reclamé el hecho de que me hicieran gastar en una toga para mi hija que salía del kinder... Por favor, de preescolar... y yo sí pagué el dinero y sólo hice el berrinche pero nada más. Lo que debí haber hecho fue no pagar ni asistir al evento, lo hice porque mi hija estaba muy ilusionada en bailar su ¡¡¡vals!!! y un cuadro de ballet clásico.

Decía al principio que me llaman mucho la atención las mujeres que cuchichean alegremente fuera de las escuelas, a diferencia de los papás, que sólo dejan a los hijos y se retiran, la explicación más simple es que ellos van a trabajar y ellas no. Aunque después, en cuanto a las madres, el hecho de quedarse a chismear, las incluya en las sociedades de padres de familia y aquí es donde está su verdadera influencia. Ellas son las que deciden qué hacer y no, claro, los titulares de las escuelas sólo dan el visto bueno, pero muchas de las cosas por las que nos quejamos, es decisión de esas mujeres que se quedan fuera de la escuela cuando deja uno a los hijos. Quizá es una verdadera lástima que las mujeres todavía estemos en el plano del "argüenderismo", además de nuestra escasa educación llena de prejuicios morales. Insisto en lo de la educación, porque me parece que es un punto medular en cuanto al cómo nos comportamos, qué hacemos, cómo lo hacemos y qué dejamos de hacer. En fin, felicito a Conflictiva por su decisión.